Machu Picchu estuvo escondido del mundo durante mucho tiempo hasta comienzos del siglo XX. Esta ciudadela fue construída entre las montañas que dan la bienvenida a la selva peruana y fue erigida en la cima de la montaña Su ubicación, paisaje y diseño la han convertido en una destino turístico imperdible para aquellos que buscan explorar Perú y sus culturas precolombinas. Esta maravilla arquitectónica alberga varios templos construidos en honor a los dioses de los antiguos peruanos y son una parte muy significativa de la cultura Inca, ofreciendo una rica historia para los visitantes.
Para aquellos que desean experimentar la magia de Machu Picchu, aquí hay algunas razones por las que deberían visitar el lugar:
El Templo del Cóndor es un templo famoso en Machu Picchu. El templo fue construido en la cima de una meseta y está ubicado entre dos grandes paredes de roca natural. El templo celebra al Cóndor, un animal sagrado para esta cultura, pues simbolizaba fuerza y poder y se creía que en su vuelo por el Valle, iba recolectando nubes para asegurar lluvia para los habitantes del imperio. El templo tiene una estructura central que se cree era utilizada para celebrar rituales religiosos.
Otro templo destacado es el Templo de las Tres Ventanas. Está ubicado en la parte occidental de Machu Picchu y, como todas las estructuras de la zona, está hecho de piedra. El templo está dedicado a Inti, el dios sol y está formado por tres grandes ventanas de forma trapezoidal. Estas ventanas eran parte de los rituales religiosos que se llevaban a cabo en la ciudadela. Se cree que este templo fue un lugar de reunión para los sacerdotes, quienes eran los encargados de presidir las ceremonias rituales en honor a los dioses Incas.
También existen otros templos en Machu Picchu, como el Templo de los Sacerdotes y el Templo de la Luna.
El Templo de los Sacerdotes estaba dedicado a los dioses incas de la tierra y está construido con grandes bloques de piedra pulida. Se cree que este templo se utilizaba para realizar ceremonias religiosas y ofrendas a los dioses.
El Templo de la Luna fue construido para venerar y honrar a Killa, palabra quechua para nombrar a la luna. Está formado por una serie de escaleras de piedra que conducen a la parte más alta del templo, donde se celebraban rezos, ofrendas, pagos a la tierra, todo bajo la luz plateada de la luna llena.
En definitiva, los templos incas de Machu Picchu son una parte muy importante de la historia de ciudades y pueblos cusqueños, pues los antiguos habitantes del imperio, tenían la costumbre de construir edificaciones para honrar a sus dioses, tenerlos contentos y comunicarse con ellos a través de rituales tradicionales. Hoy en día, los templos históricos ofrecen una oportunidad única para conocer la cultura y la historia de los antiguos peruanos de esta región. Estos templos son una parte vital de la historia de Machu Picchu y son un destino turístico imprescindible para aquellos que desean conocer a profundidad la cultura Inca.